Prolongación del QT: qué es, qué medicamentos la causan y cómo evitar riesgos
La prolongación del QT, es un cambio en el tiempo que tarda el corazón en recargarse entre latidos, visible en un electrocardiograma. También conocida como intervalo QT alargado, puede desencadenar latidos peligrosos que ponen en riesgo la vida si no se controla. No es una enfermedad en sí misma, sino una señal de alerta que muchos medicamentos, condiciones médicas o incluso factores genéticos pueden provocar.
Algunos antibióticos, como la eritromicina o la ciprofloxacina, antidepresivos, como la citalopram o la escitalopram, y hasta ciertos fármacos para el ritmo cardíaco, como la amiodarona o la quinidina, son conocidos por alargar el intervalo QT. Esto no pasa en todos, pero si ya tienes problemas cardíacos, tomas varios medicamentos o tienes niveles bajos de potasio o magnesio, el riesgo sube. La torsión de punta, un tipo de arritmia grave que puede derivar en paro cardíaco es la complicación más seria.
Lo más importante es que esta condición muchas veces no da síntomas hasta que es demasiado tarde. Algunas personas sienten mareos, palpitaciones o desmayos repentinos, pero otros no notan nada hasta que ocurre algo grave. Por eso, si tomas medicamentos que pueden afectar el QT, tu médico debe hacer un electrocardiograma antes y, a veces, repetirlo. No ignores los chequeos de rutina, especialmente si cambias de fármacos o empiezas a tomar suplementos que afectan los electrolitos.
En esta colección de artículos encontrarás comparaciones reales de medicamentos que pueden afectar tu ritmo cardíaco, desde antibióticos hasta tratamientos para la ansiedad o el dolor. No se trata de evitar todos los fármacos, sino de saber cuáles son más seguros para ti, qué combinaciones hay que evitar y cómo monitorear tu salud sin alarmarte sin razón. Aquí no hay teorías abstractas: solo lo que necesitas saber para tomar decisiones informadas y proteger tu corazón.
