Salud Mental: cómo cuidarla fácilmente
Todos hemos sentido que la cabeza está llena de cosas, pero pocas veces nos paramos a preguntar cómo afecta eso a nuestra salud mental. No necesitas ser un experto para reconocer cuándo algo no va bien y buscar una solución práctica.
Entender los trastornos más comunes
Los problemas más habituales son la ansiedad y la depresión. La ansiedad se manifiesta con nerviosismo, tensión muscular o pensamientos que no paran de girar. La depresión, en cambio, suele aparecer como falta de energía, desinterés por actividades que antes disfrutabas y una visión negativa de ti mismo.
Otro tema frecuente son los efectos secundarios de algunos medicamentos psiquiátricos, como el aumento de peso con antipsicóticos atípicos. Si tomas Risperdal u otro fármaco similar, presta atención a cambios en tu apetito o en la forma del cuerpo y habla con tu médico.
Estrategias prácticas para el día a día
1. Respira consciente: dedica cinco minutos a respirar profundo, inhalando por la nariz y exhalando lentamente por la boca. Este simple ejercicio reduce la respuesta de estrés en menos de diez minutos.
2. Mueve el cuerpo: una caminata corta o unos estiramientos al levantarte del escritorio mejoran el estado de ánimo gracias a la liberación de endorfinas. No hace falta ir al gimnasio, con 15‑20 minutos diarios basta.
3. Desconecta de las pantallas: establecer límites de tiempo en redes sociales evita la sobrecarga informativa que alimenta la ansiedad. Apaga el móvil una hora antes de dormir y usa ese espacio para leer o meditar.
4. Alimenta tu cerebro: incluye alimentos ricos en omega‑3 (pescado, nueces) y antioxidantes (frutas rojas, verduras verdes). Estos nutrientes están vinculados a una mejor regulación del estado de ánimo.
5. Habla con alguien: compartir tus pensamientos con un amigo, familiar o profesional reduce la carga emocional. No esperes a que el problema sea grande; una charla breve ya marca la diferencia.
Si notas que los síntomas persisten o empeoran, busca ayuda especializada. La terapia cognitivo‑conductual, por ejemplo, ha demostrado ser eficaz para tratar tanto ansiedad como depresión sin necesidad de medicación en muchos casos.
Recuerda que cuidar tu salud mental es tan importante como cualquier otro chequeo médico. Pequeños cambios cotidianos pueden prevenir problemas graves y mejorar la calidad de vida.